Incorporar perros cuando se tienen niños y gestionar bien el nacimiento de un niño cuando ya hay un perro en casa no es algo difícil pero sí conviene estar informado para saber qué pautas hay que seguir.
Los perros y los niños son potenciales amigos. En una casa con niños la llegada de esta mascota puede desatar un cojunto de emociones que hay que saber gestionar. Tanto por el perro como por el niño. Por el primero porque a veces los niños quieren con tanta fuerza algo que no tienen en cuenta al animal; y por el niño porque los perros no dejan de ser animales y a veces deben tener cuidado en no hacerles daño, se pueden llevar un mordisco.
Pero la pregunta es: ¿Por qué mi hijo debería tener un perro? ¿Cuáles son los beneficios de tener un perro en casa? Pues aquí va una lista de aquello en lo que el perro puede ser de ayuda en una casa:
- Responsabilidad: integrar al niño en el cuidado del perro pueden ayudar a que aprenda a cuidar y a hacerse responsable. Los paseos, la comida o la educación son formas de vincular al niño con este valor.
- Ejemplo: la educación del perro supone un ejemplo para el niño. A la vez que le enseñas que hay unas normas para este, que hay que cuidar algunas cosas, el niño recibe también la idea de que la educación y los límites existen para todos y que hay que cumplirlos.
- Conceptos naturales: con los perros, los niños aprende directamente sobre la vida: la muerte, la enfermedad, el dolor o la higiente son realidades que se transmiten de forma inconsciente pero que ayudan al niño a empatizar con la realidad, así como con la propia naturaleza animal.
- Afecto: los perros son una fuente de afecto para los niños. Si la relación entre ellos es buena, el perro se convierte en compañero inseparable y cómplice de los más pequeños. Cuando los niños son muy pequeños a veces no tratan bien al perro y requiere supervisión por parte del adulto para enseñarles a tratarlos. Y el respeto por los animales.
- Respeto: todo lo anterior se engloba dentro de esta enseñanza. El niño entenderá que hay que cuidar y tratar bien a los animales.
- Terapia: en casos de enfermedades o trastornos, hay perros adiestrados para ayudar a los niños. Un ejemplo: los perros para niños autistas.
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